El Porvenir» la última comunidad anfibia en el centro del Valle del Cauca espera a Jesús con villancicos y la esperanza que el Divino Niño de Belén les cumpla muchos de sus deseos y sueños.
Y es entre otras cosas hay detalles en común con la vida del maestro de Nazareth, como es el saber que estas comunidades de familias que viven muy cerca al río Cauca han tenido dentro de una de sus fuentes de sostenimiento la pesca que ejercen varios de los miembros de estos núcleos familiares.
Fueron pescadores quienes acompañaron al Nazareno convirtiéndose en sus primeros discípulos, siendo los comisionados por Él para comunicar su mensaje a todos los pueblos.
Por eso, al hablar del corregimiento El Porvenir en el municipio de Guadalajara de Buga, departamento del Valle del Cauca, se tiene casi por obligación que hablar de los pescadores que día a día se ganan el sustento con la atarraya que lanzan a las aguas y con los anzuelos en los que pican las bocas de los peces que ellos toman para sí.
Así, esta es de una de las pocas comunidades aún consideradas anfibias por su permanencia muy cerca a las aguas del río Cauca, contiguo al humedal de la laguna de Sonso; situación que los ha hecho aparecer en primer plano siempre que se habla de la defensa de esta laguna, uno de los únicos humedales que aún se conservan en esta región de Colombia, la cual ha estado en grave peligro de desaparecer.
Sin desconocer también los primeros planos noticiosos que han tenido estas comunidades cuando la fuerza incontrolable de la naturaleza hace que las aguas cubran estas tierras convirtiéndolos a ellos en víctimas de inundaciones, que ellos siempre han sabido sortear adáptandose a la condición de vivir con el agua a sus puertas.
Pero a pesar de intentar buscar soluciones con la reubicación de estas familias, siempre hay quiénes se resisten a considerar otra posibilidad distinta a la que han tenido durante tantos años, acostumbrándose a vivir en medio de esta naturaleza con el río que, paradojicaente siendo su amigo, también se puede transformar en su castigador cuando la fuerza de sus aguas rompe trinchos y barreras de
contención, cubriendo todo lo que encuentra a su alrededor.
Sin embargo, esto no ha sido obstáculo para que estas comunidades persistan en continuar haciendo parte de este entorno natural que por demás reúne una de las mayores biodiversidades del planeta en aves que llegan desde diferentes lugares a encontrar en el humedal un sitio de reposo.
De allí que la celebración de la Navidad tiene un sentido que se puede considerar interesante y especial en cuanto el pesebre de Jesucristo, el hijo de María, se ha construido esta vez entre una comunidad de pescadores que con sus pequeñas barcas, al igual que los discípulos de Jesús en el Lago de Galilea, también buscan en las aguas del río y la laguna, los peces para ayudar al sustento a sus familias.
Por supuesto que aquí ya no solamente hay pescadores, pues los oficios se han diversificado y la pesca no es como antes, todo ha cambiado, pero por a pesar de ello se continua hablando de iniciativas que ponen en primer orden el interés de estas familias en la laguna de Sonso y en el río Cauca,con proyectos como es el de darle a esta reserva natural, elevada a categoría de humedal Ramsar, un enfoque ecoturístico, convirtiéndola en un polo de desarrollo que genere oportunidades de ingresos y un mejor porvenir con mayor calidad de vida para los habitantes de esta zona.
Por eso, resulta muy a propósito hablar de Navidad, de Jesús, de Belén y de los pescadores del corregimiento El Porvenir y de la laguna de Sonso, (conocida también como del Chircal), ya que en cierta manera, si hubo un oficio con el que el hijo de María de Nazaret se identificó, fue con el de pescador, denominando a sus primeros seguidores, los pescadores de Galilea,como pescadores de hombres para el Reino de Dios.
En esta ocasión fue un encuentro verdaderamente fraterno el que se vivió en la sencilla caseta comunal de este lugar rural a escasos minutos de la ciudad de Guadalajara de Buga, en el que se reunieron niños, niñas y adultos, hombres y mujeres, para celebrar la novena de Navidad con el auspicio de la emisora Cuántica Stereo 97.0 FM que transmitió por facebook para la comunidad virtual de todo el mundo, llevando un mensaje de amor y un momento de alegría y de compartir solidario con familias que voluntariamente se sumaron, obsequiando regalos, dulces, galletas y refrigerios, como fue la familia Quiceno, que de manera muy simple dio a entender que cuando se quiere no termina siendo tan difícil llevar alegría y esperanza a seres humanos de los que muchas veces casi nadie se acuerda que existen cerca a nosotros.
